Sinopsis
Este es el tercer intento de reboot de la franquicia de Terminator en 14 años. Los dos anteriores fallaron, pero en este hay una diferencia: el regreso de Sarah Connor como uno de los personajes de la trama y de James Cameron (director de las primeras dos películas de la serie) como asesor y desarrollador de la historia. La película sirve como una secuela a Terminator 2, dejando de lado todo lo sucedido de la tercera a la quinta parte. De ser el caso, Terminator: Destino ocuto iniciaría tomando en cuenta los siguientes hechos: el T-1000 ha sido destruido, también el T-800 que se sacrificó por la humanidad. Sarah Connor y su hijo John están vivos y el Día del Juicio, quizás, pueda ser evitado. Se cree que a partir de un pedazo del T-800 el Terminator será "resucitado” por Sarah para ayudarles a sobrevivir de una nueva amenaza. Mención especial merece la actuación de Diego Boneta.